Somos ciudadanos convencidos de la trascendencia del respeto a los Derechos Humanos, y de la necesidad de desarrollar una política coherente entre los dichos y hechos.
Algunos hemos pasado por otras expereincias políticas que nos han desencantrado, desde la UCR, el Peronismo, Socialistas, Frente Grande, Partido Intransigente, ARI, y otros.
Buscamos desarrollar aquellas cosas que son comunes a esas historias.
En el respeto a la dignidad humana, la defensa de los Recursos naturales, el respeto a las generaciones futuras que nos impone la preervación del ecosistema, encontramos algunos de los puntos comunes a todos las experiencias vividas.
El respeto a las instituciones, la busqueda de una democracia efectiva, la preocupación de una política coherente con estas esperanzas del pueblo argentino, nos une además, con los jovenes y no tan jóvenes, sin antecedentes partidarios, que se incorporan a la lucha política.
Porque ni la esperanza, ni la fuerza nos abandona, aquí estamos.